
La siguiente parada del 999 fue el Planeta del Mañana, un mundo pacífico cuyos habitantes no sabían nada sobre vuelos espaciales. El 999 y sus pasajeros debían aterrizar en secreto. Un grupo de jóvenes, liderados por Taro y Hanako, esperaban su llegada. Si bien el grupo solo quería dar a conocer la existencia del tren, Taro quería abordar el tren. Al hacerlo, Taro robó los pases de tren y gastó dinero de Tetsuro y Maetel, así como la ropa de Tetsuro. En su difícil situación, Tetsuro y Maetel lograron encontrar alojamiento en un pequeño albergue (es decir, la habitación del tamaño de una pinta), donde Tetsuro se hizo amigo del dibujante de cómics en apuros Adachi, que había estado buscando inspiración para su trabajo. El episodio terminó con Taro ofreciendo el pase de Maetel a Hanako, quien lo rechazó.